depart

Final stage

Tras esta turbia y extraña oquedad en la que me desenvuelvo
existe un inexplicable rechazo a todo y a nada.
Sólo quiero renunciar al deforme reflejo que esta cotidianidad me devuelve.
Será que, como siempre, mis esfuerzos por entrar en contacto
son solamente eso: esfuerzos.
Y que, al fin y al cabo, vivo con unas percepciones distorsionadas
respecto de esta improbable realidad.

En otro momento hube de rechazar todo lo que tuve y no quise
y, sin embargo, inexplicablemente, me aferré a ello
creyendo que así, cumplía con mi deber.
Es mentira.

No hay más verdad que la que traspasa el corazón.
Y a esa verdad es a la que debemos de aspirar.
Todo es más simple. Más fácil de lo que parece.
Pero estamos destinados a la complicación y al conflicto.

Por tanto, no me queda más remedio que reducirme a lo poco que tengo.
Un cubículo de unos veinte metros cuadrados y unos libros de matemáticas.

Unas clases y un discreto caminar desde allá hacia mi casa.