red light streaks

Límite

Lo que trajo el viento tú te lo llevaste en un instante.
Y solo quedó el camino.
Lo que trajo la tempestad tú lo comprimiste ocupando el mínimo espacio.
Y solo quedó el cauce.
Lo que desviaron tus ojos entró en el campo de los sueños
y escapó a esta olvidada realidad.
Ahora ya únicamente existes
en ese terreno gaseoso y soluble de imágenes etéreas, oníricas.
Montado en la línea del tiempo espero la hora
para acometer la carrera que me llevará a tu finca de algodón
y confundirme con tus costillas.
Hasta entonces surcaré como siempre los atardeceres
en busca de esa oblicua nada que me espera constantemente allá, en el horizonte.
Hasta entonces, y no sin coraje, me iré desprendiendo de esta insoportable gravedad
que me atenaza para continua, aunque apenas imperceptiblemente,
llegar a ti sin llegar nunca.
Mi destino, mi límite, mi meta inalcanzable.
Allí aspiro a succionar, a robarte, en los alrededores de tu frontera,
acumulándome, alguna rebelde partícula escapada de tus cercanías.
Suspiro únicamente por una aproximación tuya.